Endodoncia

La endodoncia del siglo XXI
La endodoncia, también conocida con la terminología “matar el nervio” o “tratamiento de conductos”, es la eliminación del nervio, arteria y vena existentes en el interior de los dientes (“pulpa dental”). En términos generales, se indica una endodoncia cuando existe una lesión del nervio aguda causada por los microorganismos de una caries, en cuyo caso el paciente siente mucho dolor; o bien, cuando la lesión ha progresado tanto, que el nervio se ha deteriorado lentamente llegando a necrosarse y pudiendo ocasionar, incluso, lesión ósea en la punta de la raíz, cursando con o sin dolor. Cuando los conductos del interior del diente están completamente contaminados, se liberan más bacterias y toxinas hacia el interior del hueso, y eso puede conllevar un granuloma, una fístula, un quiste o incluso un gran flemón o absceso.
La endodoncia es realmente una especialidad de la odontología muy compleja por la dificultad de la técnica. Se trabaja en un espacio muy reducido y las anatomías de las raíces dentarias, a pesar de seguir un patrón, son únicas para cada diente. Es un trabajo muy laborioso y poco vistoso, pero crucial para salvar dientes afectados con grandes caries, traumatismos, lesiones endodónticas con origen en afectaciones periodontales, reabsorciones de las raíces, …
Además, el endodoncista trabaja sobre el conducto principal, pero realmente, el conducto en su interior presenta muchas ramificaciones, por lo que la eliminación completa de los tejidos nerviosos del interior de los conductos no es fácil. Durante toda la fase de eliminación del tejido nervioso, se trabaja constantemente con desinfectantes con la intención de eliminar todos los restos de tejidos y de microorganismos. Es un proceso que, pese a la utilización de magnificación óptica, sea con lupas de mucho aumento o microscopio, no se puede controlar visualmente.
Todos estos hándicaps que envuelven a la endodoncia han conducido a una gran evolución de esta especialidad en cada una de sus diversas facetas.
Así, en el diagnóstico, utilizamos el CBCT para detectar todas las anomalías anatómicas que puedan existir y previendo cada caso antes de iniciar el tratamiento. En Clínica Dental Padrós-Creus Muntaner podemos realizar el CBCT en la propia clínica al disponer de la aparatología Newton que nos ofrece imágenes altamente precisas y de gran ayuda.
Para asegurarnos que hemos accedido exactamente a la punta de la raíz con los instrumentos necesarios para extraer el tejido nervioso, contamos con localizadores de ápice y radiovisiógrafo (Digora).
Pero realmente, la gran innovación en endodoncia es la utilización de instrumentación rotatoria con instrumentos de Ni-Ti muy flexibles y con tratamientos térmicos. Se ha pasado del trabajo estrictamente manual al trabajo mecánico, mejorando la precisión y la rapidez.
Una vez el interior de los conductos está limpio y ensanchado, deberá sellarse herméticamente. De nuevo, otro proceso que requiere precisión, destreza, paciencia y, evidentemente, conocimiento de las diferentes técnicas. El sellado correcto es fundamental para controlar a todas las bacterias que viven en los tubulillos dentinarios, porque hay unos 30.000 por mm², con un diámetro de 2 a 4 micras, con bacterias que miden 1 micra. De nuevo, innovación con sistemas de condensación 3D y biomateriales de nueva generación.
¡La investigación y evolución continua! Hemos entrado en la era de la revascularización pulpar, la regeneración pulpar, los autotrasplantes, los reimplantes, las planificaciones 3D, …
¡En realidad, toda endodoncia puede compararse a un tratamiento microquirúrgico complejo, pero a su vez, emocionante!
Si una endodoncia fracasa, aún podemos darle otra oportunidad a la pieza afectada. Se debe valorar la opción de realizar una reendodoncia o, si existe lesión en la punta de la raíz, se puede acceder directamente a ella quirúrgicamente, practicando una apicectomía.
En Clínica Dental Padrós-Creus buscamos el máximo equipamiento para buscar el éxito de nuestras endodoncias. Disponemos de microscopio operativo Zeiss, lentes de aumento, radiovisiógrafo, ozonoterapia, sistemas de obturación termoplástica, instrumentos superelásticos de níquel-titanio, localizadores electrónicos de ápice, motores programados para llevar a cabo determinados movimientos, con torques predeterminados.
La Clínica Dental Padrós es autora de un sistema propio de adhesivos dentinarios, método original en endodoncia, que consigue un excepcional sellado del relleno interno, que ha recibido dos premios.



